Trabajos en altura; lo importante es bajar a salvo

Casi una de cada 10 muertes por accidentes laborales en España lo son como consecuencia de caídas por trabajos en altura. Son muchos los trabajos que exigen subir a un andamio, a una plataforma o a una escalera y en todos los casos lo importante es tomar las medidas preventivas para poder bajar a salvo.

Cada año mueren en España más de 500 personas debido a accidentes en el trabajo. De estos accidentes mortales, unos 50 son debido a caídas en altura y muchos de ellos se podrían evitar con programas adecuados de prevención, con una formación adecuada y con un equipamiento básico de no más de 50€.

El Ministerio de Trabajo ha puesto en marcha en las últimas semanas la campaña Trabajos en cubiertas; lo importante es bajar con vida. Según los datos del INSS cada siete días un trabajador sufre un accidente grave o mortal al caerse desde una cubierta en la que estaba trabajando, algo que tomando las debidas precauciones se podría evitar.

Este tipo de accidentes suelen tener graves consecuencias y además de provocar la muerte pueden ocasionar lesiones medulares importantes o una gran invalidez. Y al coste económico se le añaden dramas familiares y personales, costes sanitarios y perjuicios por condenas judiciales para el empresario.

Y con un buen sistema de prevención para trabajos en altura, una formación suficiente y un equipo adecuado, como un arnés básico y un cabo de anclaje, que no cuestan más de 50€, se podrían evitar la mayoría de este tipo de accidentes.

Dónde se producen más accidentes

¿Cuáles son los sectores de actividad en los que se dan más este tipo de accidentes? En primer lugar, en la construcción, con un 55% de los casos; le sigue el sector servicios, con una especial incidencia en los trabajos de logística y almacén,  con un 27%; y el sector industrial, con un 14%.

Y en cuanto al tipo de trabajo que tiene más riesgos las estadísticas dicen que el 31% de los accidentes mortales por caídas se producen desde cubiertas de edificios y construcciones, el 22% desde escaleras de mano y el 14% a través de aberturas horizontales y verticales. El 12% de las muertes se atribuye a caídas desde andamios y el 8%, desde plataformas móviles.

Los trabajos en altura demás de ser una actividad de riesgo por sí misma tienen otras características que los hacen más proclives a provocar accidentes: en muchas ocasiones quienes realizan este tipo de actividades son empleados temporales y subcontratados que no cuentan con la suficiente preparación y que, a veces, ni siquiera cuentan con los equipos de protección individual (EPI´s) necesarios.

La Ley de Prevención de Riesgos Laborales obliga a las empresas a que las personas que tienen que realizar este tipo de trabajos cuenten con una formación específica para la realización de los mismos y con el equipo de protección personal adecuado y funcional y, sobre todo, con un plan de emergencia y rescate que sea seguro y eficiente en cada caso.

¿Cuáles son las causas más frecuentes de las caídas por trabajos en altura?

Este tipo de accidentes puede tener su origen en causas humanas o materiales.

Físicas: las condiciones físicas del trabajador que debe realizar trabajos en altura deben ser adecuadas. Una edad avanzada, un mareo por una indisposición, tener sobrepeso o haber ingerido bebidas alcohólicas o estupefacientes pueden provocar este tipo de accidentes.

Psicológicas: la falta de atención por distracciones, falta de sueño o por problemas psicológicos, el estrés, un exceso de confianza, la urgencia por terminar antes, etc. pueden ser el causante de un fatal desenlace.

Formativas: el uso incorrecto de los equipos de trabajo y de las medidas colectivas  o individuales pueden ser también la causa de un accidente. Quien se suba a una cubierta debe saber colocarse el arnés y utilizar todos lo medios de prevención correctamente, para lo cual debe haber recibido una buena formación.

Ausencia o uso inadecuado de los equipos de protección.  Los EPI´S deben ser los adecuados para cada tipo de actividad. Hay que tener en cuenta los riesgos, la posible altura de caída, la estabilidad del suelo, el peso y envergadura de quien se coloca el arnés, etc. Además, estos equipos deben tener el mantenimiento requerido por el fabricante. Los trabajadores y responsables de prevención deben revisar los equipos y comprobar que están en perfecto estado para su uso.

Factores climatológicos. Las condiciones ambientales (frío, lluvia, nieve, calor…) pueden alterar las situaciones de peligro para los trabajadores. Es conveniente que la empresa tenga un protocolo en el que se indique en qué situaciones atmosféricas se deben suspender los trabajos.

Caída de objetos.  Puede ser por objetos desprendidos o que se caen por la manipulación de algún compañero que está un nivel superior. Para la protección ante esta eventualidad se suelen usar redes, rodapiés o protecciones individuales, como el casco.

Control preventivo de los trabajos en altura

Como consecuencia de las medidas preventivas a tomar, en Nalanda tenemos asignados dos tipos de riesgo relacionados con estos trabajos: Riesgo de Altura y Riesgo en Trabajos Verticales. Y asignamos EPIs y cursos específicos para cada uno de ellos.

En definitiva, que antes de subirnos a un andamio, a una plataforma o incluso a una escalera debemos ser conscientes del riesgo que asumimos y procurar tomar las medidas preventivas necesarias.

¡ Lo importante es bajar a salvo !