El 67% de las empresas en España han redoblado sus esfuerzos para ser más sostenibles, según el último Informe Europeo de Pagos de Intrum 2024. Este estudio coloca, además, a España en quinto lugar en la lista de países encabezada por Suiza. El compromiso creciente por ser cada vez más responsables con el entorno ha dejado de ser una tendencia o una opción. Se ha convertido en una necesidad para las empresas que buscan ser competitivas. En este contexto, la gestión sostenible de la cadena de suministro se ha convertido en un factor clave.
La importancia de esta consideración no solo está en reducir el impacto ambiental. La preocupación ESG aborda también la correcta gestión de los riesgos laborales, la eficiencia operativa, el cumplimiento normativo para reforzar la responsabilidad social corporativa.
Gestión sostenible de la cadena de suministro
Hay que hacer énfasis en que la gestión sostenible de la cadena de suministro no se limita a la reducción de emisiones o la utilización de materiales reciclables. Para que sea verdaderamente efectiva, debe ser integral, abordando tres dimensiones fundamentales. La primera es la medioambiental que lucha por la reducción de la huella de carbono, la optimización del uso de recursos y la minimización de residuos.
Por otro lado, está la dimensión social que busca garantizar condiciones laborales justas, promover la diversidad y respetar los derechos humanos en toda la cadena de valor. Y, por último, la gobernanza que debe fomentar la transparencia, implementar buenas prácticas empresariales y cumplir con las normativas internacionales.
Adoptar este enfoque no solo permite a las empresas operar de manera responsable, sino que también mejora su reputación. Fortalece la relación con sus stakeholders y mitiga riesgos asociados a la falta de cumplimiento regulatorio o a posibles crisis reputacionales.
Desafíos en la transformación de la sostenibilidad en la cadena de suministro
A pesar de los beneficios evidentes, la transición hacia una gestión sostenible de la cadena de suministro enfrenta diversos obstáculos. Desde Nalanda, hemos identificado cuatro grandes desafíos:
Gestión de riesgos laborales: en sectores con condiciones laborales precarias, asegurar un entorno seguro para los trabajadores es un reto complejo. Sin auditorías efectivas, es difícil detectar y corregir violaciones de derechos laborales.
Falta de visibilidad y transparencia: las cadenas de suministro globales involucran múltiples niveles de proveedores, lo que dificulta el monitoreo de sus prácticas y el cumplimiento de estándares de sostenibilidad.
Resistencia al cambio: la adopción de nuevas prácticas sostenibles puede generar incertidumbre en algunos proveedores o socios comerciales, quienes temen que el cambio incremente sus costos o afecte su operatividad.
Altas inversiones iniciales: Implementar tecnologías sostenibles y mejorar procesos suele requerir inversiones significativas, lo que representa un obstáculo especialmente para pequeñas y medianas empresas.
Estrategias para una sostenibilidad integral
Para superar estos desafíos, las empresas han de adoptar un enfoque holístico que vaya más allá de lo ambiental e incluya prácticas concretas en las dimensiones social y de gobernanza.
La aplicación de tecnologías digitales es clave para optimizar la gestión empresarial y avanzar hacia una gestión sostenible de la cadena de suministro. Las herramientas digitales mejoran la trazabilidad, la transparencia y la automatización de procesos, lo que facilita el monitoreo de proveedores y garantiza el cumplimiento de estándares ESG.
De esta manera, una transición efectiva requiere fomentar la colaboración con los proveedores, estableciendo compromisos claros y ofreciendo incentivos para la adopción de prácticas sostenibles. La ética y la transparencia deben ser pilares de la gobernanza. Priorizar relaciones con aquellos que cumplan altos estándares ambientales mejora la reputación corporativa y además genera un impacto positivo a largo plazo en toda la cadena de valor.
Nalanda te acompaña en esta transición
La complejidad de gestionar una cadena de suministro sostenible requiere de herramientas tecnológicas avanzadas que permitan monitorear, analizar y optimizar los procesos en tiempo real. Nalanda ofrece soluciones digitales para la gestión sostenible de la cadena de suministro, ayuda a las empresas a reducir riesgos, mejorar la eficiencia y garantizar el cumplimiento normativo.
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