
En las relaciones comerciales hay palabras que desencadenan tsunamis. “Arancel” es una de ellas. La sola mención de nuevas tarifas aduaneras puede hacer temblar a industrias enteras. Y cuando entran en juego materiales clave como el acero o el aluminio, la onda expansiva impacta de lleno en la cadena de suministro en la construcción: desde los grandes proyectos de infraestructura hasta la obra residencial.
Hay un nuevo enemigo silencioso recorriendo oficinas, fábricas y almacenes. No hace ruido, no lleva uniforme y no se reporta fácilmente en una hoja de incidentes. Se cuela entre pantallas, códigos QR y notificaciones constantes. Hablamos de la fatiga digital, también conocida como fatiga cognitiva, un fenómeno cada vez más presente en los entornos laborales hiperconectados.
La transformación hacia un modelo empresarial más responsable es un reto, pero la digitalización y la tecnología pueden convertirse en grandes aliadas. La gestión sostenible permite optimizar recursos, minimizar impactos ambientales, garantizar la seguridad y salud de los trabajadores y el desarrollo empresarial alineado con principios de sostenibilidad. En este contexto, la tecnología juega un papel clave para facilitar la transición hacia una gestión más eficiente y responsable.